Gira americana

Una gira que dejó menos huella que el disco de Estefanía de Mónaco

El 20 de Julio de 1969 , pese a que mucha gente desconoce este hecho, comenzó la primera y última tournee americana de Alcachofo.

El recital tuvo lugar en un campamento de boy scouts en Cuenavaca DF (Mexico), llamado "Campamento para niños con problemas auditivos Wilfredo Peralta". El pabellón Wilfredo Peralta Memorial se vistió de gala para el acontecimiento. Como persona preocupada por los problemas sociales, Alcachofo actuó de forma desinteresada. La actitud de los jóvenes castores también fue desinteresada, exceptuando el momento en que Alcachofo cantó una seguiriya y la vena que le salió en el cuello hizo mucha gracia a los chavales.

En gran medida la escasa cobertura mediática que tuvo este acontecimiento se debió a que a un tal Neil Amstrong le dio por pisar la luna, y claro, todos los periodistas como borregos a cubrir la noticia.

Esa misma noche tuve el honor de entrevistar al artista, que herido en su orgullo por el desinterés de la prensa, se cubrió de gloria al exclamar la siguiente sentencia: "Habría que ver al buzo ese cantando por bulerías"

Neil nunca respondió a esta provocación, no se sabe si por que era del tipo de personas a las que acobarda entrar en este tipo de enfrentamientos o por que no tenía costumbre de leer el "Daily Cuernavaca" (periódico en el que se publicó la noticia en la sección de sucesos, junto a un artículo que hablaba de un hombre que se había estrangulado a sí mismo hasta la muerte y después había prendido fuego a su casa).

La tournee continuó en la isla de Jamaica, donde había vendido algún ejemplar de su single "porro po po porro po porro popero". Todo estaba preparado para que actuara como telonero de la gran figura del reggae Bob Marley, pero mientras esperaba en el camerino se mareó con el humo y se sintió indispuesto (tuvo que ingerir varias biodraminas para poder recuperarse).

En la isla de Cuba tuvo el honor de actuar para el comandante Castro, el día antes de que se interrumpieran las relaciones diplomáticas entre España y la isla, precisamente como consecuencia del recital. La prensa local le hizo muy buena crítica, y en algún periódico se llego a escribir que no se recordaba algo así desde 1898.

En Argentina se anunció en el estadio de fútbol de la bombonera y tuvieron la oportunidad de verle 95000 personas. La oportunidad la tuvieron.

Tras cruzar a nado el río Bravo, se instaló en Wichita (Kansas) e ingresó en la fraternidad Alfa Omega, donde los muchachos del equipo del club de debate le dieron una calurosa acogida. Tres días después conoció a Wendy, la atractiva jefa del equipo de animadoras de los Wichita Boys y estudiante de tercer curso de paleontología.. Quedó inmediatamente prendado de Wendy, llevándose un desengaño cuando ella le comunicó que su interés por él era más bien de tipo científico. Después de haber pasado 7 meses en los Estados Unidos Alcachofo se dio cuenta de que en ese país hablaban raro (llegó a plantearse la posibilidad de que incluso hablaran un lenguaje diferente) y se volvió a su Almunia de Doña Godina natal.