Friday, August 25, 2006

Alcachofo en un crucero

Crucero

Alcachofo se codea con la alta sociedad de Liverpool en un crucero de lujo

El 18 de Febrarzo de 1993 Alcacofo destapa un yogur sabor pera, e ingiere varios centenares de millones de LK6 imunitas. Pero la importancia de este evento no radica en la ingestión de los LK6 imunitas (que creo que son como una especie de partículas moleculares hechas con unos átomos que se encuentran en las peras), sino en el hecho de que al destapar el yogur le tocó un viaje en un crucero de lujo.

El 23 de Febrarzo del mismo año, se embarca en Seeba Pike, un lujoso paquebote destinado a los viajes de placer de millonarios anglosajones.

Esa noche Alcachofo está a punto de ligar. Conoció a una joven aristócrata llamada Bethy Kathelyn Port Cool, que era hija de Sir Beavis O'Conn Duthcash, un especialista en la caza del zorro a caballo, de las carreras equinas de Ashton, y del polo, donde permanecía largas temporadas pasando frío.

La quinta noche tuvo lugar la cena de gala presidida por el capitán, que vistió su uniforme de gala para la ocasión. El capitán era conocido entre la tripulación con el simpático apodo de "el niño cabrón", debido a su escasa estatura, y a que era un cabrón. En realidad se parecía a Chucky pero con más cara de mala hostia. Bueno, el caso es la recepción consistía en que "el niño cabrón" se ponía en la puerta del restaurant e iba dando la mano uno a uno a todos los pasajeros del paquebote, diciendo "¿qué tal todo? ¿bien?". En fin, que quedaba como un gilipollas.

En la mesa en que le tocó sentarse a Alcachofo estaba ubicado lo mejor de la alta sociedad de Liverpool. Fue allí donde conoció a Bethy. Ya durante la cena, Bethy y Alcachofo se intercambiaron fugaces miradas lascivas. O al menos eso creía Bethy, por que en realidad lo que miraba Alcachofo era el steak tartar, aunque debido a su problema de estrabismo sus ojos apuntaban a los pechos de Bethy.

En el baile de máscaras que tuvo lugar en la sala Belvedere del paquebote, Alcachofo bailó numerosos valses con Bethy, pisándola siempre el el compás fuerte del 3 por 4. Bethy, que había ingerido tantos bloody maries como pisotones había recibido durante el baile, se sentía francamente excitada y justo antes de que se sorteara el jamón, invitó a Alcachofo a acompañarla a su camarote, a lo que Alcachofo respondió enérgicamente "Si,si,si,si".

Una vez en el camarote, Bethy se desprendió de su elegante vestido (un "palabra de honor" satinado que dejaba ver todas las virtudes de la dama excepto su capacidad de resolver crucigramas). En el momento en que la presión sanguínea de Alcachofo rozaba los 15 bares, el paquebote chocó violentamente contra un iceber (yo lo escribo sin g final, como pronuncian las verduleras la conocida variedad de lechuga) y Alcachofo se precipitó contra una pared del camarote. El feroz choque de la cabeza del cantaor contra la pared del camarote provocó una leve brecha en la frente de Alcachofo y una agujero de 6 cm de diámetro en el casco de acero del barco.

El agua gélida, perdón, friísima, que comenzó a fluir por el agujero, llenó en poco tiempo el barco, y por no llevar la contraria a Arquímedes, provocó su hundimiento.

Alcachofo consiguió llegar a nado a la costa, en perfectas condiciones físicas pero con el pito pequeño por el frío.

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